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Líjar es un pueblo de la sierra de los Filabres situado en una ladera en la que destaca su Castillo en la cima. La construcción del Castillo de Líjar es reciente y se ha edificado donde se considera que existía otro castillo similar en época nazarí. Merece la pena recorrer el barrio situado alrededor del castillo y que recibe el mismo nombre, callejuelas, recodos y rincones que dejan patente su pasado árabe.
Te recomendamos recorrer el pueblo desde el castillo bajando hasta llegar al río. El río Tahali o río de Lijar es otro atractivo que merece la pena recorrer. Lleva agua casi todo el año, apenas se ve pero se aprecian humedales a un lado o a otro del cauce por lo que se intuye que el agua circula por debajo. Puedes subir 500 metros el cauce y pasear entre árboles y matorrales frondosos, luego vuelves hacia el puente para subir a la carretera en dirección al “Camino Empedrado”, antiguo camino de acceso a Líjar del siglo XIX que recuerda a una calzada romana serpenteando por un barranco hasta volver al río.
Antes de bajar el camino empedrado hay un cruce desde donde puedes hacer una ruta de 30 minutos de ida y otros de vuelta para llegar al Mirador de Lijar, un lugar estratégico con una magníficas vistas panorámicas del pueblo.
A la vuelta hacia el castillo podemos visitar el Lavadero de Líjar que está junto al río y la Iglesia de Santa Maria del año 1530.
En la carretera de Líjar a Chercos puedes encontrar la Ermita de la Virgen de Fátima y el Charcón, un embalse para riego que se llena con el agua de la fuente del Algarrobo.
Si te gusta el senderismo, te dejamos dos rutas que parten desde el río de Lijar.
Esperamos que pases una feliz estancia en Líjar.
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